Yaoi en el Aire

Historias de temática yaoi (chico x chico) desde para todos los públicos hasta +18. Historia creadas por Neko-Chan y Chen. Los personajes no nos pertenecen, las historias si.

sábado, 27 de septiembre de 2014

Un día de perros (V)

Tras las palabras de la entrenadora y conseguir desprenderse del resto de los Milagros, Kagami y Kuroko emprendieron su regreso al apartamento del pelirrojo.

Por el camino,como siempre, pasaron delante de Magi Burguer, Kuroko estaba bastante seguro de que su Luz entraría a por su bandeja usual de hamburguesas pero para su sorpresa este pasó de largo.

Kagami-kun...¿no vas a entrar?

-¿He!?Ah,no- respondió Kagami volviendo en si- No tiene mucho sentido entrar, ahora se me haría muy raro comer sin tenerte delante con tu batido....Q-quiero decir, es la rutina....y... ¡¡AGH da igual vamos a casa!!-

Por supuesto Kagami-kun.

Después de esa breve conversación realizaron el trayecto en silencio, Kagami usando todo su poder mental para pensar en jugadas de baloncesto y en comida y evitar que su pequeña Sombra le leyera el pensamiento. Todavía no era el momento para eso.

Ya faltaba poco para llegar al apartamento cuando se puso a nevar, los pequeños y fríos copos de nieve sorprendiendo al Duo.

-Woaaaaa!! ¿Ya nieva?-

Humm, al parcer vamos a difrutar de una navidad blanca.

-Si!! Hace tiempo que no caía para estas fechas, suele empezar después- respondió mientras se agachaba y cogía en brazos al perrito/Kuroko- Mejor así, no sea que enfermes, ¡¡NO pienso cuidar de perros enfermos!!-

Ya es de por sí sorprendente que hayas llegado a cogerme...

-Bueno...e-eres tú así que es diferente....-

Gracias, Kagami-kun

Y para el susto de Kagami, el perro le dio un lametón en la mejilla.

-KUROKO QUE HACES!?AHORA LLEVO BABAS!!-gritó sorprendido mientras se restregaba la mejilla con el dorso de la mano- AGGG-

Oh vaya, mis disculpas, parece que hay alunas cosas que no hago por mi cuenta....

-Ya,ya, claro....stupid furball....-

Una vez en el apartamento, el pelirrojo se apresuró en cerrar ventanas y poner la calefacción. Cuando estuvo todo listo y sin nada más que hacer los dos se sentaron en el sofá bajo unas mantas a ver la tele, Kagami acostado con el pequeño cuerpo de Kuroko sobre su pecho, no tardaron mucho en dormirse....

Se encontraba en medio de una cancha de baloncesto, el sol pegaba fuerte y hacía calor. Todo parecía normal, hasta que miró al suelo.

No tenía sombra,literalmente y a pesar de que la luz del sol le daba directamente, a sus pies no se formaba sombra alguna. Estaba seguro de que necesitaba una. Y así como solo se sabe en los sueños, Taiga entendió que debía buscar la suya. Empezó a correr, realmente no sabía a donde iba pero igualmente lo hizo, cada vez hacía más calor y el sol quemaba,¿DONDE ESTABA?¿DONDE?¿DONDE ESTÁS?¿¡KUROKO!? Quién era Kuroko y por qué lo busca, no lo sabía, pero lo necesitaba. En ese momento todo su entorno cambió, ahora todo era negro, no había nada, solo oscuridad. Siguió corriendo sin dirección alguna gritando el nombre de esa persona, una y otra vez, agobiado de no poder ver nada calló de rodillas, y el negro empezó a ahogarle...

“Kagami-kun..........Kagami-kun.......”

Ah! El conocía esa voz!

Como si las sombras se desintegraran,empezó a aparecer una mano de la nada, y de la misma forma también aparecían otras partes del cuerpo, que terminaron por formar a un joven peliazul con una capa hecha de sombras.

“¿Qué haces ahí Kagami-kun? Vamos a llegar tarde”

Sí, era verdad,este era Kuroko....Estiró la mano y agarró la del otro, tirando de él hasta que pudo abrazarlo apoyando su cabeza en el hombro del más bajo.

-Kuroko,Kuroko....Te buscaba, no te vuelvas a ir,¿entendido?

Ahora Taiga era un niño,agarrado con fuerza a la capa del otro mientras lloraba de alivio.

-Te quedarás conmigo para siempre¿vale? Y echarás a las sombras malas¿verdad?

“Te lo prometo,solo yo seré tu sombra Kagami-kun”

-Tienes que serlo!! La gente no puede vivir sin sombra!! No es lo mismo si no estás conmigo!! Yo te quiero!!

El peliazul movió los labios formando una respuesta pero el sueño ya se estaba desvaneciendo.....

Kagami parpadeó, frunciendo el entrecejo mientras intentaba ubicarse. Oh! Era cierto, estaba en su apartamento, se había quedado durmiendo en el sofá.

Se removió un poco, las mantas pesaban, y se restregó los ojos con una mano, juraría que acababa de tener un sueño rarísimo.....del que no recordaba nada.

¡Por Dios! ¿Qué demonios pasaba con estas mantas tan pesadas y...!!!!! PERO QUE CANASTAS!!!

Encima de él estaba Kuroko,eso se lo esperaba en parte....

¡¡¡¡LO QUE NO SE ESPERABA ERA QUE TUVIERA FORMA HUMANA Y ESTUVIERA DESNUDO!!!!

-KUROKO!!!- el grito de Kagami retumbó por todo el edificio mientras este se apresuraba en levantarse del sofá y alejarse todo cuanto podía. Por su parte, Kuroko despertó al ser zarandeado por los movimientos del pelirrojo.

-Kagami-kun...?-

-Ku-Ku-Kuroko, tu cabeza, es decir tú, me refiero!!-

-Al parecer vuelvo a ser humano, no entiendo el porqué de tanto revuelo- respondió tranquilamente Kuroko sin hacer ningún movimiento para taparse, Kagami, sentado en el suelo, solo podía señalarle y boquear como un pez mientras un hilillo de sangre se le escapaba por la naríz.

-....O-Orejas-

-¿A qué te refieres Kagami-ku...!? Oh-

Al tocarse el pelo, el peliceleste entendió la reacción de su Luz. Si que había vuelto a tener forma humana, a excepción de dos peludas orejas sobre su cabeza y, ahora que lo notaba, una cola.

-También tengo cola-

-EHH....AHHH....PU-PUES-

Kagami por su parte a penas podía articular palabra, estaba presenciando la imagen más erótica de su vida. Se maldijo mentalmente por pensar así cuando no era el momento ¡malditas hormonas!

Y el peliceleste no ayudaba, justo en ese momento Kuroko decidió que lo mejor que podía hacer (para mortificación de Kagami) era acercarse a él tal como Dios lo trajo al mundo y arrodillarse enfrente, inclinando la cabeza mientras movía las orejas de forma inocente.

-¿Te encuentras bien Kagami-kun?Te veo un poco rojo-

A Kagami se le descolgó la mandibula.

Kuroko por su parte sonrió ligeramente, esto iba a ser muy divertido.

CONTINUARA

ESCRITO POR : CHEN

domingo, 21 de septiembre de 2014

Shadow and Light (I)

Dolor. Ira. Pena. Tristeza. Odio. Frustración.

Todos esos sentimientos son los que me atacan ahora mismo. Me llamo Kuroko Tetsuya y acabo de morir por dentro. Volvía de trabajar deseando que mi queridisimo novio Kagami Taiga estuviese en casa para poder pasar una noche juntos como hacia semanas que no pasábamos. Es lo que tiene que tu novio sea bombero. Que siempre está salvando vidas y apagando fuegos. El único fuego que no apagaba era mi fuego interno.

Llegué al bloque de apartamentos donde vivimos mi luz y yo. Y me llevé una muy grata sorpresa. Las luces estaban encendidas. Subí y abrí la puerta con cuidado. Empecé a oír gemidos y gruñidos y empecé a asustarme. No podía ser el. Era imposible.

Estaba en la puerta de la habitación y las lagrimas ya estaban nublandome la vista. Con manos temblorosas y deseando que mi novio estuviera viendo "Hard Yaoi", abrí la puerta.

Me quedé congelado con la imagen que se presentó ante mis ojos. La luz de un relámpago iluminó aun más la evidencia. Mi querido novio me estaba poniendo los cuernos con mi ex novio de la secundaria, Aomine Daiki.

-Ka-Kagami-Kun...

Ahora entendía tartan idas y venidas para ir de cañas con Aomine-Kun, porque habían dejado de insultarse o lo habían en broma.  Eran amantes.

Ambos chicos me miraron. Sus miradas reflejaban culpa. La de mi novio más. Seguía sin poder creerlo.

-Kuroko te lo puedo explicar.

Salí corriendo en ese mismo instante. Oí los gritos de Kagami-kun pidiéndome que me parara. La lluvia caía con fuerza haciendo que el agua que tocaba mi cara se llevara mis lágrimas.

-¡Kuroko para!

Kagami-kun me seguía muy de cerca. Paré y me di la vuelta para verle.

-Kuroko ven aquí. No hagas el tonto por favor.

Negué. Me había hecho mucho daño. Prefería morir.

-¡KUROKO!

Vi un fogonazo de luz y entonces lo entendí. Quise correr pero mis piernas me fallaron. Vi como la luz se acercó más hasta que todo se volvió negro. Oía gritos y la voz de Kagami-kun llamarme pero no pude responder. Poco a poco fui perdiendo más la consciencia en mi mismo hasta el punto de quedarme totalmente dormido.

CONTINUARA

ESCRITO POR : NEKO-CHAN

Shadow and Light. Resumen.

En el amor no había traiciones, o al menos eso pensaba Kuroko Tetsuya antes de encontrarse a su novio Kagami Taiga en la cama con su antiguo novio de la secundaria, Aomine Daiki. Pero, por un golpe del destino, Kuroko pierde la memoria hasta tal punto de no recordar a su actual novio. ¿Conseguirá Kagami volver a enamorar a Kuroko o caerá en las garras de Aomine o de Kise?

sábado, 20 de septiembre de 2014

Vaya par de dos

Quien me diría a mi, Armin Arlet, acabaría de esta forma...

Habíamos conseguido acabar con los titanes y habíamos encontrado un reducido grupo de persona que, asombrasamente y contra todo pronóstico, habían sobrevivido todo este tiempo. Bien, pues aquí empieza la cuestión. Fuimos un grupo de lo más representativo a hablar con esas personas. Al llegar, pudimos ver que todos llevaban los trajes de ataque y pareciéndose muchísimo a nosotros. Incluso había algunos iban vestidos del titan colosal y del titan femenino. ¿Era una broma o que?

Nos sentamos en unas sillas que nos prepararon y empezaron a hacernos preguntas de lo más raro. Que si Eren estaba con el Heichou. Que si el Heichou estaba con el Danchou. Que porque yo era un llorica. Que si Misaka sentía algo por Eren... Y lo peor vino después. Propusieron hacer retos y accedimos. Pues aquí van algunos de los retos que nos propusieron. Que el Danchou besara al Heichou. Que el Heichou besara al Danchou. Que Eren cogiera una cuchara de Hanji... Entonces, una de las chicas (iba como disfrazada de mi) propuso su reto.

-Mi reto va para Eren y es que... Que bese a Armin.

Me puse rojo como un pimiento y Eren también. Nosotros éramos amigos desde pequeños y esto para nosotros seria lo peor del mundo. Estamos sentados uno al lado del otro. Nos miramos y pasó. Fue mejor de lo que había pensado. Mi primer beso. Con mi mejor amigo. Lo hacía con tanto cariño y dulzura que sin saber porque me quedé con ganas de más. Todas las fans gritaban mientras veían nuestro beso pero para mi solo existimos Eren y yo.

La pequeña reunión se saldó sin ningún sobresalto más. Cuando todo terminó, fui como una bala al baño. Necesitaba estar solo y pensar lo menos posible en lo que acababa de pasar. Pero no lo conseguía. Los suaves labios de Eren, el latido de su corazón, su respiración agitada. Todo eso pasaba por mi mente en ese momento. ¡¿Por qué había tenido que pasarme esto?!

Alguien entró en el baño. No presté mucha atención a quien era pero al oír su voz, el corazón se me desbocó.

-Armin tenemos que hablar.

-No tenemos nada de lo que hablar Eren. Lo de antes será mejor olvídalo.

-¿Olvidarlo?

-Si, olvidarlo.

-Pero Armin, no me digas que no sentiste nada con ese beso. Porque yo si.

Le miré sin llegar a creerme lo que el me estaba diciendo. Había sentido algo con el beso. Y no quería olvidarlo. Intenté jugar bien mis cartas.

-Estaba muy nervioso y no pude sentir muchas cosas... Tal vez si me dieras otro beso... Podría sentir algo más....

- Cómo eres Armin.

Volvió a besarme y felizmente correspondí. Cada vez el beso se fue volviendo más y más salvaje. Llegó hasta tal punto que acabamos haciéndolo en uno de los servicios. Que mal... Al menos fue bueno e intentó que me doliera lo menos posible.

¿Qué si somos ahora pareja? La verdad es que... No. Bueno, es una cosa rara. Muchas noches, Eren se acerca a mi pidiéndome cariño, pero el resto de las noches se las pasa ayudando al Heichou con trabajos que le manda ayudarle. ¿Por qué siempre Eren? Como si no hubiera otras personas que le pudieran ayudar.

Mikasa siempre que nos ve acaramelados, dice cuatro palabras que antes me molestaban pero que ahora con un "ve a que el Heichou te de amor que se te nota estresada". Esas cuatro palabras son...

"VAYA PAR DE DOS"

FIN

ESCRITO POR : NEKO-CHAN

Japan Weekend 2014 Madrid

Bueno, esta entrada es un poco para dejaros constancia de que tanto Chen como yo (Neko-Chan) hemos ido a la Japan Weekend 2014 en Madrid.

Hemos comprado muchas cosas y hecho muchas fotos. Os las pasamos todas sin excepción para que podáis verlas y comentar si quereis.

Muchos besos. Neko-Chan y Chen

viernes, 19 de septiembre de 2014

¡Menuda casualidad! (I)

Cuando empezó el día no creí que le volvería a ver. Me llamo Furihata Kouki y estoy en la Preparatoria Seirin y soy el dorsal 12. Un jugador nada valorado que solo servía para calmar a los demás hasta que hice el partido de mi vida en la final de la Winter Cup. ¡¿Por qué lo hice?!

Me encontraba en la casa de Kagami Taiga, mi compañero del Seirin cuando llamaron a la puerta. La primera vez, Kagami abrió la puerta y apareció Kuroko, otro de mis compañeros de equipo. Esa tarde iba a haber una reunión de la Generación de los Milagros en casa de Kagami y el me pidió ayuda para tranquilizarle. Ese era mi gran "poder".

A los quince minutos o así, volvieron a llamar a la puerta.

-Ya abro yo Kagami.

-Te lo agradezco Furihata.

Me dirigí a la puerta y abrí. Me quedé helado y petrificado. En la puerta estaban el resto de la Generación de los Milagros, presidida por su antiguo capitán. Akashi Seijurou.

Aún recuerdo la primera vez que le vi y del miedo que pasé ese día, creo que me creó un trauma.

FLASBACK

Kuroko salió de la cancha donde estábamos porque el capitán de la Generación de los Milagros le había convocado. Riko, nuestra entrenadora, me pidió que le siguiera y así lo hice. Cuan grande fue mi sorpresa al encontrarme allí a cuatro miembros más de la Generación de los Milagros.

-¿Qué, Tetsu? ¿Tienes una niñera?-Dijo el del Toõ refiriéndose a mi.

-Mine-chin, tu tienes a Sachin.

-Satsuki no tiene nada que ver en esto.

-Por cierto, Midorimacchi, ¿Por qué traes tijeras?

-Es obviamente mi objeto de la suerte, idiota.

-Aunque es peligroso. Me gustaría que no caminaras con ellas por ahí.

-Lamento la espera. -Dijo Kuroko para hacerles partícipes de nuestra presencia.

Esto debía ser una locura. Estaba tan asustado que quería irme a casa. El teléfono de Kise empezó a sonar y Aomine se molestó. Daban miedo todos en conjunto. Y lo peor estaba por llegar. Además,  aunque hablaban con total normalidad, la atmósfera se sentía muy pesada.

-¿Por qué el chico que nos convocó aquí es el último en llegar?

Mi mente divagó en mi nerviosismo hasta que oí una voz nunca antes escuchada por mi.

-Lamento hacerlos esperar.

Ese era el capitán de la Generación de los Milagros. Su mirada daba miedo. Todo el daba miedo. Daba más miedo que los otros cuatro juntos.

-Daiki, Ryouta, Shintaro, Atsushi y Tetsuya. Me alegro verles de nuevo. Me conmueve profundamente que nos podamos ver así. Sin embargo, hay alguien que no pertenece aquí. Por ahora desearía hablar con mis antiguos compañeros. Lo siento, ¿podrías irte?

Realmente, en ese momento quise hacerlo, salir huyendo de allí, pero estaba congelado. No podía moverme. Y como muchas veces pasaba,  Kagami llegó al rescate para mi gran alivio. Bueno, más o menos. Akashi-san le pidió a Midorima sus tijeras para cortarse el pelo. En cuanto Midorima se las entregó, Akashi-san intentó apuñalar a Kagami con las tijeras. Menos mal que lo esquivó, que si no... Después de eso, Akashi-san se cortó el pelo con esas mismas tijeras, dejándonos con una imagen de su rostro que jamás olvidaré ya que está latente en mis pesadillas.

FIN DEL FLASBACK

Seguía plantado temblando sin poder ni hablar. Akashi-san se acercó y me aparté ligeramente de la puerta.

-Nos volvemos a encontrar. Furihata Kouki.

-Akashi-san...

No sabia porque, pero no podía apartar la vista de sus ojos. Su heterocromia parcial producía respeto y miedo. Los ojos de emperador. Rojo y amarillo. Estaba frente a un león hambriento y yo era su presa más cercana e indefensa. Lógico que me llamesen los de la Generación de los Milagros chihuahua. Bueno... Kuroko no me lo llamaba. Pero, ¿Quien no le tendría miedo después de ver como casi apuñala a Kagami con unas tijeras? Yo creo que nadie.

El jugador del Toõ me empujó entrando en la casa de Kagami como si fuese la suya propia.

-Tetsu, ya estamos aquí.

El resto de los jugadores de la Generación de los Milagros fueron entrando. Fui a cerrar la puerta cuando me di cuenta de que Akashi-san aun no había entrado. Parecía disfrutar viéndome temblar. Entró cerrando él la puerta quedando uno enfrente del otro.

-No esperaba volverte a ver.

-So-solo pasaba a saludar.

-Furihata ven a ayudarme.-Dijo Kagami desde la cocina.

-Comprendo, solo visitabas.

-Si me disculpa.

Salí corriendo hacia la cocina. Era un lugar seguro. No se porque había accedido a ayudar a Kagami en esto pero cada vez me estaba arrepintiendo más y más. Desde mi posición pude ver como todos se fueron sentando a la mesa. Kuroko entre Aomine y Kise, Murasakibara al lado de Midorima y Akashi-san presidiendo la mesa entre Midorima y Aomine.

-Furihata, llevales las bebidas por favor, que yo estoy aquí ocupado con la comida.

-Vale.

Cogi una bandeja y puse los vasos que Kagami me dio. Todos llenos de agua, menos el de Kuroko, que tenía batido de vainilla. Salí de mi refugio y me dio de lleno la mirada bicolor de Akashi-san. Intenté tranquilizarme. Llegué a la mesa y fui dejando los vasos sobre la mesa. Tuve que templar los nervios aunque fuera difícil. Akashi-san no paraba de mirarme mientras mantenía una conversación con Midorima. Entonces sucedió la catástrofe. Mis temblores regresaron haciendo que el vaso que tenía en ese momento las manos, derramase su contenido sobre la impoluta camisa de Akashi-san. Moriría joven... Y con gran dolor.

-Akashi-san lo siento muchísimo.

-No pasa nada, solo es un poco de agua. Tetsuya, ¿no tendrías una camiseta que dejarme?

-Claro, sígueme.

En cuanto vi como los se fueron, me levanté y volví a la cocina. Ese no era el Akashi-san que yo conocía. El Akashi-san que yo conocía tenia heterocromia y este no. Aparte, había sido amable conmigo. Sentí una mano en mi hombro. Asustado di un salto y grité.

-Tranquilo Furihata.

-Kagami, no me des estos sustos.

-Parece que has conocido al otro capitán de la Generación de los Milagros.

-¿Qué otro? Pero si es el mismo.

-No creas. Es... una larga historia.

-No me interesa. Me voy a casa.

No llegué a oír la contestación de Kagami. Para mí gran suerte, Akashi-san aun no había salido de la habitación. Cogi mi bolsa y salí corriendo de allí. No quería volver a ver a Akashi-san. ¡Nunca!

CONTINUARA...

CAPÍTULO ESCRITO POR : NEKO-CHAN

sábado, 13 de septiembre de 2014

Swimming Dance (XIII)

Casa de Makoto.

Todo se había terminado. Había perdido a Haru para siempre. Rin había ganado la batalla y me dolía haber salido perdedor. Rin no quería a Haru ni la mitad de lo que yo le amaba.

Haru no me contestaba a las llamadas ni a los mensajes. Había salido ha buscarle, pero no había dado con el. Ya no sabía dónde buscar. Ni en la piscina le había encontrado. ¿Y si...? Nagisa podía llegar a saber algo.

Cogi el móvil y con dedos temblorosos, marqué el teléfono de su casa.

-Venga. Venga. Venga.

-¿Sí?

-Rei, hola soy Makoto.

-Makoto-senpai, ¿Sucede algo?

-¿Podría hablar con Nagisa?

-Si es por Haruka-senpai,  no está aquí.

-No está....

Ya no sabía dónde podría estar. Empecé a llorar.

-No, acaba de salir de aquí hace unos minutos.

-Rei, ¿sabes a donde ha ido?

-Creo que ha buscarte.

-Gracias. Gracias Rei. Da recuerdos a Nagisa.

Colgué. Cogi la chaqueta y salí en la búsqueda de Haru. Sabia donde estaba. Y no me equivoqué.

-Has tardado.

Estaba en la sombra del cerezo donde de pequeños dejamos plasmados nuestros deseos.

-Me tenias preocupado.

-Necesitaba tiempo para pensar.

-¿Y que has pensado?

-En el tiempo que estuve en casa de Nagisa y Rei me di cuenta de las veces que uno se equivocaba y el otro le perdonaba y le ayudaba.

-Se quieren mucho.

-Me di cuenta de que si quieres a alguien, tienes que perdonarle aunque te te haya hecho mucho daño.

-Entonces volverás con Rin... Era de esperar. Se muy feliz Haru.

Empecé a andar. Volví a llorar. Ahora si que este era el final. Mi final.

-Makoto espera.

Me giré y me abrazó ocultando la cara en mi pecho.

-¿Haru?

-Yo te quiero a ti. Hace poco me di cuenta de que a quien de verdad quería era a ti y te he perdonado todo el daño que me hiciste en el pasado. Quiero estar contigo.

No pude decir nada más. Le besé como nunca le había besado. Me sentía tan feliz. No le había perdido. Ni mucho menos. Todo esto había conseguido que mi relación con Haru se hiciese muchísimo más fuerte. Tanto que nada la podría romper. Ni un tiburón conseguiría hacerlo. Tal vez nunca conseguiríamos llegar a ser como Nagisa y Rei, pero podríamos intentarlo.

¿FIN?

ESCRITO POR : NEKO-CHAN

jueves, 11 de septiembre de 2014

Swimming Dance (XII)

Casa de Rei y Nagisa.

Por fin Haru-Chan decidió salir de su habitación para comer algo. Rei-Chan y yo le preparamos una gran comida, pero solo tomó sopa y arroz. Entonces, abrí la boca... Para meter la pata como siempre.

-Haru-Chan, ¿Puedo preguntarte algo?

-Si. Claro.

-¿Por qué te fuiste con Rin-Chan a Australia si querías a Mako-Chan?

-¡Nagisa-Kun!  No le preguntes esas cosas.

-No pasa nada. Pues fue algo impulsivo.

~~~ Dos años antes ~~~

Desde la ruptura tan dolorosa con Makoto había pasado mucho con Rin. Tenia razón en eso de que se había vuelto más fuerte. Me sentía muy agusto a su lado, pero mi corazón no terminaba de recuperarse. Sabia que Rin estaba enamorado de mi y yo sentía algo por él, pero el dolor que había dejado Makoto lo nublaba todo.

Me desperté y vi que Rin me observaba. El me sonrió. No éramos pareja, lo único es que le había pedido que se mudara a mi casa para poder tenerle cerca si necesitaba un abrazo. Él accedió casi al instante. Me acurrucado más cerca de él y oculta la cara en su pecho. Él me abrazó y me dio un beso en la cabeza.

Él me colmaba de atenciones y yo no era capaz de devolvérselo. Cuando lo intentaba, yo acababa llorando y él me abrazaba hasta que me calmaba del todo.

-¿Ha dormido bien mi delfín?

-Más o menos.

-¿Quieres que te prepare el desayuno?

-Si pero...

-¿Sí?

-¿Podríamos quedarnos un rato más así?

-Claro.

Permanecimos así durante un rato más. Me armé de valor y le di un pequeño beso en los labios. Fue corto pero lo suficientemente largo para darme cuenta de que mi corazón ya se había recuperado y, además, lo que sentía hacia él, había vuelto con más fuerza.

-Rin...

-Dime Haru.

-Te quiero.

-Yo también te quiero. Creí que nunca oiría esas palabras salir de tus labios.

Y de esa forma Rin y yo empezamos a salir. 

Todo fue muy bonito, hasta ese dia.

Nagisa nos llamó porque quería nuestra opinión para un nuevo proyecto: que montasemos una academia de natación. Aceptamos quedar con el para hablar del tema. Quedamos por la tarde en la cafetería que había cerca de donde yo trabajaba de cocinero. Cuando llegué, solo estaba Rin. Me senté a su lado y le di un pequeño beso en los labios. Poco después, aparecieron Nagisa y Rei. Estuvimos hablando de todo y de nada a la vez mientras esperábamos a Makoto. Cuando llegó Makoto, no fui capaz de mirarle a los ojos. Rin me acarició la mano por debajo de la mesa para tranquilizame. Al final, los cinco accedemos a abrir la academia. Nagisa, Makoto, Rin y yo como profesores y Rei y Kou administrando el dinero. 

Al cabo del tiempo, pudimos ver que la idea de la academia había sido acertada. A Rin se le ocurrió la idea de montar otra academia en otro sitio. En Australia por ejemplo. Recuerdo la cara de Makoto cuando Rin dijo que yo iría con el para que nuestra relación no se rompiera.

-No puedes irte Haru. 

-¿Por qué no? 

-Porque tu sitio está aquí. Con nosotros. Conmigo. 

-Pero yo no quiero estar contigo. Ya no te quiero. Rin es al que quiero.

-Pero Haru...

-No Makoto. Se acabó. Me hiciste mucho daño. Me dijiste cosas que me rompieron el corazón. 

-Yo no quería...

-¿No querías llamarme mal bicho, embaucador o zorra? 

-No debí decirlo. Lo siento.

-Ni se te ocurra disculparte porque nunca te perdonaré. ¡TE ODIO MAKOTO TACHIBANA! 

A los pocos días, Rin, Kou y yo cogimos el vuelo yo me llevó a la perdición.

~~~ Actualidad ~~~

La historia de Haru-Chan nos había dejado helados.

-Haru-Chan...

-Estoy bien Nagisa. No os preocupéis por mi. Me lo merezco.

-No te mereces eso Haruka-senpai. 

-Si me lo merezco Rei.

-Haru-Chan, una cosa más. 

-Dime Nagisa. 

-¿Qué sientes ahora por ellos?

Se quedó un rato callado antes de volver a hablar. 

-A Rin le odio por lo que me hizo y a Makoto... A Makoto aun le quiero. 

-Pues digaselo Haruka-senpai. 

Haru-Chan asintió. Se levantó y se fue corriendo a buscar a su amor.

CONTINUARA....

ESCRITO POR : NEKO-CHAN

lunes, 8 de septiembre de 2014

Swimming Dance (XI)

Centro comercial

Desde que me fui a Australia siempre estuve pensando en Haru. No me lo podía quitar de la cabeza. Todas las noches soñaba con el y me dolía que al despertar el no estuviera. Cuando volví y le volví a ver, la verdad es que me pasé de borde con ellos. Sobre todo con Haru.

Entonces, vi la oportunidad perfecta para poder decirle todo lo que sentía por él.

Me encontraba en la sección deportiva del centro comercial cuando les vi, los celos se me dispararon. Ver de esa forma a Haru con Makoto, verles así de cerca, me mataba. Hice lo posible para que Haru me viera. Y lo hizo. Salí de allí y me dirigí al pequeño parque que había fuera. Pocos segundos después apareció Haru. Sólo. Punto para mi.  Empezamos a hablar.

-¿Qué hacés aquí Rin?

-Solo quería hablar contigo.

-Pues ya lo estas haciendo.

-Se que me comporté como un gran idiota pero todo tiene una explicación.

-¿Cuál?

-Estoy celoso. Odio verte con Makoto y que esteis tan cerca. Porque...

Me paré. No sabia si era una buena idea seguir hablando, pero ahora no podía parar.

-Mira Rin, no tengo ganas de perder el tiempo. Me voy.

Vi como empezaba a caminar. No podía permitir que se fuera. Corrí hasta darle alcance y le agarré haciendo que su espalda diera contra la valla.


-Hace tiempo te dije que me volvería más fuerte y vendría a por ti y nos iríamos juntos. Pues a eso he venido, porque... Porque te quiero Haru.

Fui a besarle pero quitó la cara.

-Estoy saliendo con Makoto. Lo siento.

-Algún día el te dejará. ¿Y sabes? Yo estaré ahí para que puedas llorar en mi hombro.

Y así fue. A los pocos días, Haru me llamó para decirme si podíamos hablar. Le dije que viniera al Samezuka. Allí podríamos hablar más tranquilamente. A los quince minutos, Haru me llamó diciendo que estaba en la puerta de mi instituto. Pero antes de bajar tenia que ocuparme de otra cosa. Nitori. 

-¿Quien le ha llamado Rin-senpai? 

-No te interesa. 

-Digamelo Rin-senpai. 

-¡No voy a hacerlo! 

-Cuentemelo Rin-senpai. 

-¡Qué no Nitori! Me voy que ya llego tarde. 

En el camino a la calle,  me encontré con Nagisa. ¿A donde iría?  Lo cierto es que en esa época aun no conocíamos a Rei pero Nagisa ya buscaba nuevo miembro para su club. Según me había dicho mi hermana. 

Encontré a Haru y al verle me dio algo. Tenia ojeras y los ojos rojos por haber llorado. Al verme, corrió hacia mi y me abrazo volviendo a llorar. 

-Makoto me ha dejado.

-Shhh... Tranquilo.... Yo cuidaré de ti.

Haru me miró con los ojos llenos de lágrimas y me besó. Yo correspondí a su beso. Era feliz y a la vez no era feliz. No quería ver triste a Haru. Había sido yo el culpable de que Makoto le dejara. Sabia que nos estaba viendo cuando estábamos hablando. Intuía que Haru sentía algo por mi y lo utilicé a mi favor.

Soy como un tiburón, acechando a mi presa para atacar en el momento justo.

CONTINUARA

ESCRITO POR : NEKO-CHAN